Ya vamos por el 6!! :D

Van dos entradas prácticamente seguidas...la anterior tenía que estar ayer..pero el sueño pudo conmigo y lo dejé para hoy...y si me da igual subo otro...asiq tendréis mucho para leer, pq intentaré hacerlos largos a partir de ahora :333 Espero que lo disfrutéis :D

Capítulo 6

Era extraño, Amu siempre había deseado poder estar a solas junto a Tadase muy acaramelados. Él era el chico que le gustaba desde que empezó en quinto de primaria, sus sentimientos por él seguían vivos a pesar del tiempo que ha pasado ya. Pero… desde que ha visto a Utau e Ikuto se siente extraña, el pequeño rey le gusta eso lo tiene claro desde hace mucho, pero nunca ha sido capaz de declararse a pesar de la buena relación que tienen.

-No sé qué me pasa…me siento extraña…- decía Amu para sí misma y sus charas que estaban ya dormidas- mm...Será mejor que intente dormir un poco…a pesar de que mañana es un día relajado…necesito descansar…- tras decir esto se quedo dormida.

Al día siguiente las charas de Amu, Ran, Miki y Su, tendrían un largo día por delante y una misión muy importante para ellas, ese día de Domingo…tendrán la difícil misión de… ¡Animar a Amu! Sabían que Amu odiaba los Domingos, esos días en los que no te queda más remedio que estar en casa por no poder ir a ningún lado para divertirse, acompañada o sola.

-Amu-chan…- dijeron las tres al unísono para despertar a su querida dueña- ¡buenos días!

-¿mm…? Chicas…porque me despertáis tan temprano…hoy es domingo…prefiero estar en cama la mitad del día…-dijo medio dormida la pelirrosa

-Pero, tienes que cuidar de Ami, recuerda que tus padres tenían una importante cita hoy y Ami se levantará en un rato- dijo Su.

-…- no contestó nada, se limitó a levantarse bajar las escaleras y disponerse a preparar un desayuno para su hermanita- ¿Eh?- vio una nota- ¡QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE! ¡Mis padres se han llevado a Ami con ellos para que pudiese estar tranquila!

-Amu… ¡hagamos algo divertido!- dijo Ran

-¡Sí! Vamos de compras - dijo Su.

-Pero…hoy es domingo…no podemos ir de compras- dijo Miki

-Olvidadlo chicas…me voy a la cama de nuevo…- dijo Amu medio triste

-Amu-chan…-dijeron tristes las pequeñas

-¿Qué le pasa a vuestra dueña-nya?-dijo alguien por detrás de las pequeñas

-¡AHHHHHHHHHH!- Gritaron las tres charas- ¿Quién eres tú?

-Sr. Gato, ¿cómo se llama?-le preguntó Su.

-Hmm…hmm… Mi nombre es Yoru-nya- dijo sintiéndose orgulloso.

-¿Y de quien eres chara?- preguntó Miki

-Ikuto-nya-dijo él alegremente.

¿I? ¿ku? ¿to? Las tres pequeñas se quedaron extrañadas, ese nombre les sonaba de algo pero no sabían exactamente de qué. Tras una larga charla con Yoru, Miki se acordó de que le sonaba el nombre.

-¿¡Y si hacemos que Amu salga a dar una vuelta con Ikuto!?- dijo Miki alegremente

-Imposible-nya, Ikuto está ocupado-nya-dijo Yoru

-¿Qué haremos para alegrar a Amu-chan…?-las tres volvían a estar tristes

-¡Yo me ocupo-nya!- tras decir eso salió volando por la ventana

Amu seguía encerrada en su habitación, era la primera vez en mucho tiempo que se sentía tan deprimida, sentía ganas de llorar, llorar desconsoladamente era lo que más le apetecía en ese momento. Pero sabía que por mucho llorar no solucionaría nada e incluso podría hacer que se pusiera peor…al rato alguien llamó a la puerta de su casa. La pelirrosa bajo y abrió la puerta despreocupadamente, seguía con el pijama puesto. Se sorprendió al ver lo que vio nada más abrir la puerta.

-¡I-Ikuto! ¡Utau! – ambos estaban allí, finalmente Amu comenzó a llorar

-Amu…- Utau la abrazó con fuerza- te dije que cuando quisieras me llamaras y vendría para estar contigo…Tonta…-le dijo sonriendo.

-Perdóname Utau….-le correspondió el abrazo con gusto.

-Bueno… ¿podemos entrar? No es muy cómodo estar viendo como dos chicas se abrazan mientras estoy fuera de la casa….-dijo Ikuto medio serio

-Claro que podéis entrar-le contestó Amu sonriendo

Se pasaron el día hablando de muchas cosas, incluso Utau le enseñó a Amu a cocinar una receta de galletas que ella misma había inventado. Ikuto las veía y se sentía tranquilo, pero de lo que no se daba cuenta era de que constantemente estaba cerca de Amu o la miraba más a ella.

-¿Ikuto-nya?-le dijo Yoru al ver que Ikuto estaba como en otro mundo

-¿Qué quieres?- dijo el seriamente

-N-nada…- Yoru se fue con las otras charas, las dos de Utau Iru y Eru, y las tres de Amu.

-Finalmente has conseguido que Amu se sienta bien, gracias Yoru- le dijo Miki sonriendo

-Logró que vinieran porque Utau estaba deseando venir y no sabía donde vivía Amu entonces Ikuto la acompañó- dijo Iru

Las otras cuatro charas miraron para Yoru que estaba disimulando y empezaron a reírse. Sabían que mientras ellos estuvieran cerca Amu se sentiría distraída y no empezaría a preocuparse. Ya era casi la hora de marchar de Utau e Ikuto, pero justo cuando estaban a punto de despedirse los padres de Amu y su hermanita entraron por la puerta.

-Ya llegamos, Amu.-dijeron sus padres en coro

-Hermana, ¡llegamos!- dijo Ami

Amu, Ikuto y Utau se quedaron mirando para ellos.

-Oh, que tenemos visita…lo siento Amu-se disculpó la madre.

-No tiene porque disculparse Sra. Hinamori- le dijo Utau – de todas maneras nosotros ya nos íbamos.

-¿Eh? ¿Os conozco?- la madre de Amu se quedó dubitativa mirando para ellos.

-Hermana, ¿Quiénes son? Ami no los conoce-le dijo a Amu escondiéndose detrás de ella

-Ami, estos son Ikuto y Utau, dos amigos que conocí cuando tenía tu edad- le dijo sonriendo

-¡Ah! Ikuto-kun, Utau-chan, cuánto tiempo sin veros. Habéis cambiado muchísimo- dijo la madre de la pelirrosa.

Tras una larga charla con los padres de Amu, estos se fueron a su casa. Amu era feliz, por una vez había podido disfrutar de un domingo de una de las mejores maneras que podía elegir. Antes de ir a la cama empezó a recordar de cuando era pequeña y jugaba cada día con ellos, era tan inocente, sin preocupaciones…